miércoles, 29 de julio de 2015

Reflexiones: Ananké Asseff

Reflexiones es un espacio para pensar el arte

Después del anterior artículo: “Sobre como acercarse al Arte Contemporáneo". Introducción.

Antes de continuar profundizando este tema tan apasionante con más artículos, he decidido continuar con una sección denominada:


Una Invitación a mirar

Mi idea es relatar desde mi impresión personal, que veo, como veo y que pienso frente al arte.

Después de asistir a diversas muestras de arte, me siento a escribir que me ha sucedido, que he podido ver, pensar y sentir.

Sin ninguna intención de que mi descripción pretenda ser única o la portadora de la revelación intencional del artista. Ni que este sea el exclusivo modo de abordar un encuentro con el arte.

Las impresiones o los análisis que generan las obras son muy personales y pocas veces coinciden con la intencionalidad, si la hubo del artista que la ha creado.

Tampoco aspiro a realizar una crítica, ya que no soy una persona especializada en esa profesión, solo expresar como me aproximo a los tantos e infinitos lenguajes del arte.


Una Invitación a mirar I

ARTISTA ANANKÉ ASSEFF

Arte en la Torre “El miedo al viento”
Elegí ir a visitar esta muestra porque despertó mi atención su titulo poético y sugerente, que actúa como un dispersor de pensamientos.

El nombre del lugar también colabora en el misterio de la invitación, arte en la torre un espacio que me lleva a pensar en un lugar donde se encierra algo valioso, donde se lo cuida y se lo atesora donde se lo resguarda, pero en este caso se lo muestra y no se lo esconde.

El curador de la muestra, FERNADO FARINA, explica en su texto,-“ que el viento no tiene cara y nos pregunta cuál es la peor de las amenazas, la que existe o la que imaginamos”-

El miedo que es tan ancestral como el hombre mismo, que siempre esta rondándonos de formas visibles e invisibles para perpetuarse en la vida de todos de una u otra manera. Y el viento como uno de los fenómenos que forman parte de una constante en la naturaleza.

¿Pero que significa el miedo al viento?, el miedo a lo que no veo, a lo que no tiene una presencia corpórea pero que se siente, y nos envuelve. El miedo, que nos paraliza, o que nos empuja a decisiones adversas, o salvadoras.

Cuando entré en el espacio de exhibición las obras están en la planta baja de la torre y no en lo alto, en un salón circular y completamente vidriado en donde el interior y el exterior se vinculan.

La obra tiene dos actores y se llama “Despertando al tigre”, un animal y un hombre en tamaño real.

El tigre es brillante parece de acero pero cuando me acerco es de poliuretano sobre resina, sin embargo algo me distrae, su mirada no atemoriza, está en marcha y no mira al hombre es como si estuviera concentrado en otra escena, no establece dialogo y si continuará su andar me da la impresión que pasaría sin percibir la presencia del hombre.

El hombre realizado del mismo material mira al tigre y queda como congelado en una actitud de sumisión o entrega a su destino fatal, sin protegerse, con los pies juntos y las manos sujetas.

La amenaza está en camino y el miedo está paralizado, contemplando de frente al hombre y por detrás del tigre la escena me dio desesperación y cuando cambie de lugar, ósea, mirando de frente al tigre y por detrás del hombre reitero el tigre no era la amenaza, entonces todo depende en donde ubicamos al miedo, y como cambia según la mirada.

Aquí el miedo tenía un cuerpo pero contradictoriamente no está representado en él, sino en lo que interpretamos.

Otra obra formaba parte de esta muestra.

Una gran ola de barro, de ocho metros de alto por seis de ancho y cuatro de espesor, sin título y con una frase que dice:”Los cambios se manifiestan con fuerzas, las resistencias con violencias”

La ola era una masa pesada y de enorme magnitud. Pararse debajo daba miedo, de nuevo miedo a pesar que está detenida en el instante de mayor altitud sin poder desmoronarse.

Acá el miedo a lo inevitable, a la finitud, a la violencia representada en la naturaleza, de lo que no podemos defendernos quizás solo llegar a sobrevivir.

La escala de lo real se corporiza, se hace presente, invadiendo con su dimensión un espacio que la contiene y la exhibe.

Una ola que se viene de una manera ineludible, de la que no imagino cómo salir a flote, por el que nadie quiere ser arrasado.

Finalmente “Constelaciones “una video performance. Instalación: video proyección que no estaba exhibida en ese momento.

Según la explicación del catalogo consistía en un espacio cerrado con diez personas paradas.

Comienza a inundarse con agua que ingresa a presión, se agrega variaciones de temperatura, viento y luz. Las personas desconocen cuando durará esta experiencia hasta dónde llegará el agua y la única consigna es resistir.

Aquí en este caso, no puedo agregar mi opinión porque no pude verla.

Esta muestra está basada en un proyecto llamado CORRIMIENTOS a él pertenecen algunas obras más que no fueron integradas en esta oportunidad pero que se muestran en el catalogo.

De todos modos el concepto de este proyecto a mi entender es el tratamiento que le damos a los miedos más que las representaciones que se hacen presentes y que permanentemente nos convocan a reflexionar, teniendo en cuenta que el proyecto se llama Corrimientos quizás es como decir que nuestros miedos no son inevitables, pero que la diferencia estará en cómo nos desplazamos a otro sitio donde poder verlos desde otras perspectivas y sostenerse.

Estela Alicia Mancini



Biografía

Ananké Asseff, Buenos Aires, 1971.

Artista visual.

Ha recibido distinciones y premios como la beca KHM Academy of Media Arts Colonia, Alemania; la residencia en Banff Centre for the Arts, Canadá (2004-2005) junto con la de Fundación Antorchas.

Ha sido galardonada con el Premio Leonardo a la Fotografía (Asociación de Críticos de Argentina) en el año 2002 y con una beca del Fondo Nacional de las Artes en el 2001. Desde entonces su trabajo ha sido reconocido y premiado por los salones más importantes de Argentina, tal es el caso del Salón Banco Ciudad 2002, el 1er. Premio OSDE 2004 y Premio Federico Jorge Klemm 2009. En el 2007, recibió un subsidio del Fondo Metropolitano de la Cultura, las Artes y las Ciencias de la Ciudad de Buenos Aires.

Ha participado de numerosas exposiciones individuales y colectivas en Buenos Aires, San Pablo, Lima, Chile, Colonia (Alemania), México DF, País Vasco y Nueva York, esta última, ciudad a la que fue invitado por Martin Parr a participar del NYPF. También formó parte de la X Bienal de la Habana, así como de otros tantos festivales internacionales durante el 2008 y 2009. En el 2010, forma parte de la exposición que acompaña a la Feria del Libro de Frankfurt, en la que Argentina participa como invitado de honor.

Su obra integra las colecciones del Museo de Arte Moderno de Río de Janeiro, el MNBA, MAMBA, Museo Municipal de Bellas Artes Juan B. Castagnino (Rosario), MACRO, Palais de Glace, Museo Provincial de Bellas Artes Emilio Caraffa (Córdoba), Fondo Nacional de las Artes, Fundación OSDE y colecciones particulares.











El Arte Contemporáneo


Sobre cómo acercarse al Arte Contemporáneo…
Introducción.

“Tenemos arte para no morir con la realidad”
                                                                       de Friedrich Nietzsche


Esta frase que nos abre el pensamiento y le pone alas, se precipita en un abismo oscuro para algunos que no hallan la ruta del vuelo.
Pienso que:
El arte genera una mirada introspectiva en las emociones y pensamientos, acerca de todo lo que rodea al mundo del hombre.
Pero ¿Que sucede con el arte hoy?
Porque:
Mirar, comprender y emocionarse con el arte se puede tornar inaccesible.
En las últimas décadas el arte ha generado cambios en su representación, que dificulta en ocasiones su acercamiento.
Sobre este modo de vincularse con  el arte, muchas son las reflexiones que han sido abordadas a través del tiempo, por un gran número de estudiosos que con distintos grados de conocimientos o especialidades, han expuesto sus opiniones, sus conceptos y sus teorías.

 Mi intención es acercar, una opinión que sume una mirada más a este debate en:

-Cómo entiendo y que me sucede con algunos planteos del arte moderno-

Tomo esta inquietud para reflexionar porque a menudo me encuentro con preguntas, en las cuales hay un tema recurrente, la incomprensión  en el modo, en que algunos artistas han decido crear y plasmar su manera de entender el arte.
Si bien es cierto que la opinión del espectador nunca está presente a la hora de un acto creativo, si se reúne con ella cuando llega el momento de mostrar lo creado.
Y es aquí cuando, en algunas ocasiones,  se produce un desencuentro. 
Aunque existe un público que se incluye desde distintos puntos de apreciación en torno a la obra, están también los que se sienten desconcertados y hasta en un punto decepcionados frente al arte.
Es comprensible que suceda cuando intervine en ello un concepto que está profundamente arraigado en el pensamiento colectivo, acerca de cuáles deben ser las características que deben contener las obras.
Que además estas premisas se han trasladado en el tiempo.
Es importante considerar que:
 No podemos valorar una obra de arte actual sin considerar todas las variables que actúan en el resultado final de la misma, así como tampoco no establecer la directa relación que existe con lo que acontece al momento histórico que vivimos y menos aún pretender hallar los mismos códigos estéticos pertenecientes a obras de otros momentos de la historia del arte.
Porque es un arte que se maneja sobre otros elementos, con otro sistema de códigos, con una multiplicidad de técnicas, y tecnologías aplicadas.

Entonces:

Es aquí cuando llega uno de los interrogantes  más reiterados que casi siempre es acompañado por una expresión de perplejidad  

¿Esto es arte?
Es decir, algo que se lo presenta como obra  no se lo puede reconocer como tal, e inmediatamente invade  la duda acerca de cómo podemos reconocer el arte del que no lo es, y quienes son los que avalan que es arte, sobre que parámetros basan su valoración.
¿Qué es arte? Es una muy buena pregunta pero todavía el hombre no ha podido definir este concepto que ha estado y continúa estando en discusión.
 Podría agregar que no se puede conceptualizar el arte en una única respuesta.
Si la pregunta es entonces ¿Cómo definen las personas el arte?
Puedo sintetizar que:
Entre muchas respuestas que podrían intentar expresarlo, y desde una óptica occidental, para un gran número de personas el arte es algo estéticamente bello; que inquieta el alma desde las emociones; que se conecta con nuestro pensamiento; que supone un virtuosismo  en la elaboración de la obra; que está  asociado con el concepto de lo sublime; o que representa un deleite para contemplar, pensar, soñar.
Entendiendo que esta descripción responde a un público que disfruta y se deleita con la obra de arte y para el que además debe ser bella.
Estas son los conceptos más extendidos y aceptados, formulados para valorar una obra que maneja el público en general.
 El arte actual  propone  que el público no sea solo un espectador contemplativo de la obra, sino que sea un actor participe, y reflexivo frente a la propuesta del arte, en donde la representación de la obra no siempre está presente.
 La idea, o el concepto son  los protagonistas principales y la obra ya no es más la invitada que acapara toda la atención.
Para graficar esto cito una frase

“Estoy interesado en las ideas, no simplemente en productos visuales”
                                                                                             de  Marcel Duchamp

En cuanto al concepto de belleza que se espera ver en una obra, invariablemente se lo vincula con otra pregunta ¿podemos definir que es bello de lo que no lo es? ¿Qué es la belleza?
Como entenderán  nos encontramos frente a otra pregunta que no puede ser universalmente y unánimemente contestada
La belleza puede ser comprendida desde múltiples aristas, para cada cultura lo bello es concebido de muy diferentes maneras.
Y a su vez cada ser entiende lo bello según un amplio abanico de modos de apreciación.
Durante muchos siglos, lo bello, lo bien logrado, la obra, en el mundo del arte, y para muchos espectadores  ha estado  relacionado con lo que han legitimado fundamentalmente las entidades como los Museos y las Academias de Arte.
Entendiéndose que desde las instituciones académicas se impartían los conceptos y los cánones del arte, el oficio, las investigaciones, las evoluciones y desde el Museo se le otorgada la validez que supone su perpetuidad en la historia.
Esto se vuelve tangible cuando estamos en un Museo frente a una obra  de arte clásica, en donde el hombre o los hombres que han realizado estas magnificas obras sin importar los años o siglos transcurridos continúan sorprendiendo y maravillándonos.
Pero el mundo de las ideas cambia y el hombre vive en un cambio constante.
Estos cambios han revolucionado las ideas en lo social, en lo cultural, en lo político, en las ciencias, en lo económico, en lo religioso, en lo filosófico, y por supuesto en el arte.
Para comprender esto:
si vamos hacia atrás en la historia vemos que el arte fue mutando al lado del paso del hombre, en sus inicios se uso para dejar una huellas de la existencia de una civilización, para mostrar escenas acerca de la caza, para mostrar cómo se veía la naturaleza, para comunicarse con los dioses y los muertos, para enseñar la fé, para plasmar hechos históricos, para contar costumbres, para mostrar personajes de distintos estratos sociales, para mostrar paisajes, para decorar, para ilustrar cuentos, para contar emociones, pensamientos, filosofías, y  misterios, porque  el arte está en el hombre, surgiendo como una necesidad o como solo una idea.
Esta frase cierra lo que deseo explicar:

                    “Si el mundo fuese claro, el arte no existiría”
                                                                                             de Albert Camus

En la actualidad contamos con la ventaja de reflexionar sobre el pasado,  aún el más reciente.
Permitiéndonos  sumergirnos  en un análisis cada vez más profundo de todos estos interrogantes, es cómo, si pusiéramos al arte en una lente del microscopio y muchos especialistas aportan infinitos  modos de analizarlo.
El concepto del arte, del espectador, del artista, de la Academia, del Museo o del  crítico se puso en discusión y el arte comenzó a transitar por un camino desconocido hasta entonces.
Para tener un encuentro con el arte actual, se hace indispensable conocer el lenguaje conceptual, que invita a una reflexión constante.
Esto no significa estar de acuerdo con este modo de abordar el arte, ni que las personas renuncien a su elección en los encuentros con el arte.
Es más entre las obras de arte actual hay controversias acerca de su validez.
Por ello  cada persona debe ejercer la libertad de decidir con cuales de las tantas opciones que hoy disponemos desea vincular su conexión con el arte sin sentirse marginado en su elección.
El arte esta y forma parte del hombre acompaña nuestro crecimiento estimulando la percepción, nos indica que hay más de un modo de ver la misma realidad, el arte es inabarcable, es libertad, es tolerancia a lo diverso, es creatividad, es cuestionador, nos permite valorar el mundo que nos rodea, las diferentes perspectivas de una mirada, las múltiples maneras de pensar.

                                           El arte siempre es pensado


Esta es una breve introducción que se irá enriqueciendo con más reflexiones de este análisis que está en una discusión no acabada.


                                                                                           Estela A. Mancini